El recuento, el volver a contar los votos o el revisar las cuentas en las actas, no ha sido ajeno a nuestra experiencia electoral. En el 1990 se solicitó, se inició y, como se hizo sin método alguno, terminó siendo un ejercicio frustrado. En el 1994 se realizó una revisión completa del cómputo y el resultado no evidenció problema alguno en ese aspecto.

Una demanda de recuento prospera cuando los resultados son tan estrechos que cualquier pequeño error tiene potencial de hacer una gran diferencia. En nuestro sistema electoral no existe normativa alguna que lo reglamente. De ahí que para el que dice que ganó se puede convertir en una amenaza. Pero aun en países y estados en donde se contempla el recuento, cuando el margen está dentro de un porcentaje predeterminado, la ausencia de estándares puede generar caos e insatisfacción.


La elección presidencial del 2000 en Estados Unidos y, en particular, en la Florida dejó una cicatriz en la memoria política y electoral. El tema comparece a cada momento en el debate político y, ahora, en la campaña electoral.

Precisamente eso es lo que evidencia la reciente película auspiciada por HBO “Recuento” (Recount). Con muy buenos actores (Kevin Spacey, John Hurt, Tom Wilkinson, entre los más conocidos) trata de la elección mas controversial en la historia política del país. Y obviamente del recuento en los condados de West Palm Beach, Broward, Volusia en la Florida.

Esta siendo presentada repetidamente en los canales de HBO tanto en su versión original en inglés como en español. Y no es por caso que se haga en el presente cuando dentro de poco se iniciara el duelo entre los candidatos republicanos y demócratas. Tal y como está realizada, critica a los republicanos y presenta a la gente de Gore y los demócratas como víctimas de la trampa y la manipulación. Es una película inclinada a una de las partes y no a la presentación de una situación compleja en los que ni hay un bueno ni un malo químicamente puro.

Quien haya tenido interés en esa contienda, cuando sucedía, o la curiosidad de entenderla después, tendrá mayores posibilidades de comprender los detalles de la historia. Un público ajeno a las elecciones estadounidense no logra captar mucho de sus matices.

En julio 2007, en este espacio semanal, se ofreció una serie de cuatro comentarios sobre el tema (La tormenta de Florida, Infierno Electoral, La crisis de los inválidos y Para disipar la tormenta. http://jebfa.blogspot.com/2007/10/la-tormenta-de-florida.html). No viene al caso ahora volver a ellos.

El pecado de aquellas elecciones fue que la ruleta de detuvo en la Florida y que el margen de diferencia resultó irrisorio. Es crisis en cualquier latitud. El que gano dirá que gano y el que perdió sostendrá que perdió por trampas.

En el film se muestran las estrategias de ambas “campañas”: sus habilidades, sus mañas, sus aprovechamientos. Más que aceptarla como recuento, ha de recibirse como estímulo a la curiosidad.

© Julio Brea Franco 2008
Florida, USA

Publicado originalmente en Periódico HOY de
República Dominicana
Junio 10, 2008